miércoles, 29 de octubre de 2008

Orden y progreso maradoniano

A mi me puso contento la elección de Maradona. Es más, me atrevo a decir algo que choca un poco con la azonada de voces reinantes: la designación de Maradona como técnico de la selección tiene motivos de disciplina y orden. Maradona, junto con Bilardo, se convierten en hombres y palabras autorizadas y con autoridad para dirigir un seleccionado gobernado por los magníficos Tevez, Aguero, Messi, Riquelme, Heinze, Demichelis, Gago, Mascherano. Es decir por las principales figuras del Manchester, Atlético de Madrid, Barcelona, Boca, Bayern Munich, Real Madrid y Liverpool. NADIE, Como?, NADIE agrupa a estos jugadores en el mundo. Jugadores fundamentales de los principales equipos del mundo. entonces mi hipótesis es que Maradona junto a Bilardo responden a las necesidades de ORDEN TÁCTICO y AUTORIDAD LEGITIMADA que pueden brindar estos 2 tipos. Maradona en un vestuario pone en igualdad de condiciones a cualquiera de estas figuras. TODOS estos jugadores mencionados desean la palabra de aliento y aprobación de su ídolo máximo, y la idolatría es una forma de autoridad y control. Me imagino a eldiego abrazando a Di María, y un Messi o Tevez o Riquelme haciendo lo posible para ser merecedores de ese abrazo. Entonces eldiego diga: meté en la cancha, esto es la selección, esto es lo más grande que te puede pasar en tu vida deportiva y como abuelo de Heidi, les cuente una história épica de sus años de 10. Y entonces los pendejos de más de 50 palos se saquen el IPOD y lo escuchen encantados. Los deje satisfechos para que aparezca Bilardo con la escuadra y el manual y los trastorne en serio, de una vez por todas.

martes, 28 de octubre de 2008

8)

Era de noche. Estábamos caminando en uno de esos espacios abiertos que combinaban cemento y tierra, tan típicos de los paisajes públicos actuales de las grandes ciudades. La luminaria poseía una intensidad tal que permitía una visión óptima y de cierto magnetismo. En un momento nos detuvimos. Tuvimos el presentimiento de que algo sucedía. Quienes me acompañaban poseían rostros no reconocibles pero en definitiva me acompañaban. Íbamos juntos. Pertenecíamos, de alguna manera, a un mismo espíritu. Decía que detuvimos la marcha y miramos al cielo. Por encima de la altura de los faroles que enfocaban nuestro espacio apareció un OVNI. Este objeto tenía la típica fisonomía de un plato volador de las películas clásicas de Hollywood. Por encima de la superficie ovalada se edificaba una cúpula que definía al objeto como un trompo pero de superficie plana. Claro, en definitiva era un plato volador que no requería una base en punta que le permitiese girar sobre su eje como los conocidos trompos del tiempo de ocio de nuestra niñez. Por debajo de la superficie ovalada, varios focos de luces de variados colores contrastaban con el gris opaco de la fachada del acorazado. Las luces se tornaron intermitentes, era una nave voladora estilo disco. Solo faltaba la música. En su lugar una voz comenzó a hablarnos. En nuestro lenguaje y en nuestro idioma. Con palabras y en castellano. El formato era de mensaje sin espacio para él ida y vuelta de preguntas y respuestas, de opiniones y pareceres. El disco volador hablaba y nosotros escuchábamos, temerosos. La idea de ser atacados nos invadía. Estábamos agazapados, como esperando el momento donde el misterio de aquella presencia externa deviniese en asalto. El misterio se presentaba como posibilidad de desintegración física de nuestros cuerpos. Luego de un rato, las palabras cesaron sin haber podido comprender del todo el motivo de su presencia. La nave inició el descenso al mismo sitio donde estábamos, lo que motivo la búsqueda de un refugio que nos tranquilizara, que nos escondiera. No alcanzó a aterrizar, más bien se deslizó a pocos centímetros de la superficie de cemento. Recuerdo estar detrás de una columna y ver una ventana amplia en la cúpula e la nave. La posibilidad de visualizar el interior de la nave me motivó. Fui siguiendo el recorrido de la nave sin ser visto, corriendo entre las columnas del boulevard. Mis compañeros estaban desperdigados por la zona. Nadie me acompañaba en esta empresa. Estaba solo. La nave viró. Me daba la sensación de estar buscando un sitio para estacionarse, pero enseguida el ruido de motores se hizo intenso, adelantando un despegue definitivo. Y allí alcance a ver su interior. Una pareja de ancianos comandaba la nave. El reconocimiento fue instantáneo. Eran unos viejitos famosos por sus testimonios acerca de la presencia de OVNIS. Decían haber tenido contacto con extra-terrestres y les rendían homenaje a esos visitantes del universo con performance de este estilo, reproduciendo todo ese bagaje que el cine había escenificado en las películas del género a varias generaciones en los últimos setenta años.
Mientras todo esto recordaba, antes que la nave se nos pierda en las alturas, el viejo promotor de la vida extra-terrestre sacó de debajo del control de mandos una botella y un paño. Con una sonrisa me miró y se esfumó velozmente como la nave. Recuerdo mi indignación y mi último pensamiento antes de abrir los ojos: no puede ser, a los OVNIS los auspicia Budwaiser.

viernes, 24 de octubre de 2008

martes, 21 de octubre de 2008

Masocas


Preludio

El cambio de hora lo hice en la casa de un amigo. Estábamos festejando su cumpleaños. Eso apuró la decisión de irnos. Antes de salir tenía en el celular dos mensaje, de mi hermano y mi sobrino, que me habían conseguido una entrada para el súper-clásico. Despedí a mis amigos y amigas que se iban a una fiesta y caminé hacia algún transporte que me llevara a casa, a la dulce espera. La idea de ir a la cancha así, de repente, sin mucha planificación, de modo inesperado, me entusiasmaba. Últimamente todo lo inesperado me entusiasma. Atrás quedaba el recuerdo del último river-Boca que presencié, en el cuál juré no volver a vivir un bodrio parecido. Fue el cero a cero de Merlo y Basile sentados en cada banco. Recuerdo haber contabilizado dos jugadas para river y media para boca. Un fiasco a tribuna llena. La puesta en escena de pactos pre-existentes entre los dos amigos. Este no podía ser igual, aquellas figuras ya no dirigían el juego. Mi carnet del millonario está en mora hace varios meses, marzo creo. Desde la cancha, nada me ofrecía mi equipo y hacía rato que yo no ofrecía nada desde las tribunas. El contrato estaba roto. Pero volver al Monumental en un river-boca y de modo inesperado, me sonaba grato. En definitiva estos pensamientos pretendían lograr un entusiasmo que durante la semana había perdido viendo la performance de la selección de Basile. Ese equipo, que jugó en Santiago sin enganche, sin un diez que distribuya, que pare la pelota y piense, sin Román digamos, me recordaba la intención constante de Simeone de hacer jugar al pibe Buonanote de volante por izquierda. Allá, cerca del corner, pasivo del juego. En la espera de otro no virtuoso que le arrime el balón apenas para tirar un centro. Cuanto desperdicio. Cuanto desprecio por el juego. Así estaba la cuestión. El suceso Basile mostraba que el rejunte de los mejores jugadores sin una organización del juego, sin la habilidad táctica que permitiese sacar el mayor provecho para el equipo, no garantizaba el resultado, ni el buen juego. Todo quedaba librado a la inspiración de sus jugadores. Era la entrega a un virtuosismo individual en el vacío de un equipo. Y llevando este planteo a river me encontraba con un equipo si enganche, sin virtuosismo y sin equipo. ¿Para qué iba a ir a la cancha?, me preguntaba si Román llevaba la diez estampada en la azul y oro. Y sabemos que el estadio no es el mejor sitio para neutrales. Pero aún así, me parecía un despropósito no aceptar esa entrada al gran acto del fútbol. Me sostenía en la esperanza, ese lugar común universal, que sentencia: los clásicos son partidos apartes. No importa que ocurrió antes. Es decir, el clásico no transita el camino de la historia ni de los pronósticos. Sin vueltas, el domingo me levanté y me fui a buscar mi entrada.
Pasé por lo de mi hermano y ya ahí las cosas se pusieron medias fuleras. La entrada, producto de la re-venta, tenía un precio cinco veces mayor al oficial. Seamos claros acá: mi hermano me ofreció una entrada de re-venta con un precio cinco veces mayor al valor de ventanilla. Ya no se puede hacer familia ni con la familia, pensé. En mi mano tenía la prueba de la estafa, una Sívori media quintuplicada en su valor. Tomé el subte y me baje en la estación Congreso. El paisaje era un colectivo humano de remeras de diversos diseños con el blanco y la franja roja cruzada. Después me enteré que la consigna era ir al estadio con la remera del equipo. Yo, bien gracias, pantalones de lino verde y remera gris. Ya desentonaba entre los feligreses. Mientras caminaba observaba a los extranjeros, europeos y más precisamente británicos, que replicaban aquí el ritual de la cerveza previo al partido en los bares que encontraban a su paso. A los locales, por nacionalidad, nada los detenía en su marcha hacia el evento. Nosotros hacemos la previa en el mismo estadio, con cocacolas y hamburguesas, sentaditos, esperando y parados, gritando. Grité mucho en la previa al comienzo del partido. Había una potencia retenida, contenida, luego de este período alejado de los campos de juego. Y lo saqué para afuera. En su mayoría, los cantitos mantenían esa impronta xenófoba con gargantas letales que ameritaban un desfile por el imaginario programa INADI Nights. Con la conducción estelar de M.J. Lubertino. Así y todo me entregué a la efervescencia del lugar. Observaba los bombos, la entrada sincronizada de la hinchada en su rol principal. Todo me sonaba familiar. La reserva había terminado uno a cero para river. Los pibes habían tocado la pelota en toda la superficie del campo de juego. Estábamos bien. La gente estaba contenta y expectante. Los equipos entraron y el ritual de la explosión de gargantas y banderas acompañó el trote de los once jugadores. Luego entró el visitante, el imposible de imitar Boca Juniors. Ahí estaba Román. Startdeshow, Baldasi.

Fin de acto

El partido ya fue. Terminó. Ganó el que tenía un jugador menos. Ganó el que tenia enganche. Ganó el visitante. El rival de ¿toda la vida? Ganaron los otros. Los de enfrente. Los que eran poquitos y apretados en ese corralón vengativo. Aquellos cuyo coro de voces era famoso pero ni se escuchó. Nosotros éramos, una vez más, mucha gente y poco equipo. Y los de enfrente no se iban. Cantaban, movían las manos, aplaudían, se reían, se burlaban. El club decidió, apenas terminó el partido, elevar el volumen a tope de los parlantes con avisos de publicidad que saturaban. Y ellos no se iban y la música taladraba el tímpano. Después de cuarenta y cinco minutos, la tribuna de enfrente quedó vacía. Vacía de gente pero llena de contenido. Una bandera solitaria decía: otra vez será!!! Abran la puerta, comenzó a gritar la gente. Y yo también lo deseaba en silencio. Los comentarios post-partido son infernales. Más cuando perdes y peor cuando es con boca de local: son un desastre, no juegan a nada, se tienen que ir todos. Es decir, lo de siempre. El estado de ánimo, alrededor de dos tiempos de cuarenta y cinco. Desde la popular coreaban el nombre del burrito. Como se sintió su ausencia. Porque con un tipo que marcara el pase y pusiera la pausa creo que alcanzaba y sobraba para este partido. Éste boca es un rival mediocre, y el river de Simeone es un equipo acelerado al mango.
Abrieron las puertas y camine hasta la estación Congreso de Tucumán, mi destino era San Telmo, previa combinación. Pero en la estación siguiente, un grupo de boquenses abordaron y coparon varios vagones de la formación. Y ahí si se los escuchó. Tenían mucho que decir: que les dolía la pija de tanto coger, que Ahumada tenía razón. Y varias puteadas más. Uno de ellos en particular, agitaba con todo. En su mano tenía un asiento del estadio que se había choreado, y lo estampaba contra las paredes del vagón. El ruido y la exaltación atemorizaron a los pibes con camisetas de river y caras de pollitos. Había ganado el más fuerte en el vagón. Un rato antes, en la cancha, había ganado el más inteligente. Ese equipo que juega alrededor de un diez que sabe como caminar el césped. Ahora estamos cerca del puesto vigésimo del campeonato. En diez partidos ganamos uno. Pronto tocaremos un nuevo fondo. Así, acelerados, como su técnico. Pronto, el Monumental será la sede oficial del primer encuentro masivo de masoquistas. Y yo estaré ahí, con el escudo tatuado en el hombro.

viernes, 17 de octubre de 2008

miércoles, 15 de octubre de 2008

Análisis Septiembre 08

Vamos a observar un poco los datos del mes de Septiembre (acá, acá, acá y acá). El contexto de estos números se ubica luego de haber pasado algo más de dos meses de la votación parlamentaria decidida por el vicepresidente Cobos. Vicepresidente que se situó, desde los argumentos expuestos previo a su votación, como un actor neutro del conflicto. Aunque su decisión, contraria a la posición del Ejecutivo Nacional, trastocó el panorama político. A partir de este voto, Cobos se posicionó por fuera de la estructura política de la coalición de gobierno a la que pertenencia. Su lectura de la opinión mayoritaria de la población, que no acompañaba el posicionamiento del gobierno, le permitió concentrar para sí una alta valoración positiva de su figura contrastando con la caída pronunciada de la presidenta y de su marido, Néstor Kirchner. Hoy por hoy, y teniendo en cuenta el espacio de tiempo restante para las próximas elecciones a presidente (2011), se ubica con una intención de voto superior a la que lograría incluso Néstor Kirchner, Presidente (2003-2007) que supo concluir su mandato con una imagen positiva que alcanzaba a casi siete de cada diez entrevistados a nivel nacional. Recordemos que el caudal electoral para una supuesta re-elección del patagónico era mayor al que lograba Cristina Kirchner. Pero otras cosas sucedieron en estos setenta días posteriores al conflicto. La presidencia de Cristina, quien por el mes de Julio apenas arañaba un 27 por ciento de imagen positiva, pudo recomponer poco a poco su valoración (aunque aún está lejos de los índices de sus primeros meses de gestión (Diciembre-Marzo) con decisiones que pretendieron recomponer la iniciativa de gestión. Respaldada en los números superavitarios de la balanza comercial y fiscal, y en el crecimiento constante de los indicadores económicos, y además sintiendo el golpe del conflicto agropecuario logró frenar la amenaza de legitimidad lograda en las urnas y puesta en cuestión por sectores económicos, mediáticos y de la población. La re-estatización de Aerolíneas Argentinas, la decisión de pago al Club de París y la ley de movilidad jubilatoria fueron los pilares del cambio de tendencia que permitieron esa recomposición parcial. Además de posibilitar un hecho inédito de la gestión global del kirchnerismo como fue la conferencia de prensa brindada por la mandataria. Con todo esto, hoy Cristina logra una imagen positiva de alrededor de los 40 puntos porcentuales. Similar a lo que logra en la provincia de Buenos Aires, distrito de gran peso electoral. Si nos concentramos en los escenarios electorales testeados no se vislumbra un posicionamiento fuerte de algún supuesto candidato. Es decir, el escenario post conflicto agropecuario profundiza la crisis de representación de los partidos pero también de los liderazgos constituidos al calor de esa crisis del sistema de partidos persistente. En el primer escenario, Mauricio Macri, apenas alcanza los 26.2% de votos, seguido por Cristina Kirchner con 17.7% y Elisa Carrió con el 11.7%. Si cambiamos a Cristina por Néstor, el caudal electoral del oficialismo aumenta al 25.5% dejando a Macri en segundo lugar con el 18.8%. Carrió se mantiene en el tercer lugar con 12.5%. Ahora bien, si sumamos a Julio Cobos al escenario, observamos que reciente popularidad lo ubican el tope de las preferencial con el 29.3% de las menciones, relegando al resto de los candidatos elegidos en estos hipotéticos escenarios.
A partir de estos datos se mensura la fuerte caída sufrida por el kirchnerismo donde sus principales referentes no logran acaparar una mayoría consistente. Además no se vislumbra hoy por hoy otros dirigentes con “chapa” de candidato que promueva el oficialismo. Habrá que ver que sucede con la fama alcanzada por Cobos tras su voto “no positivo”. Es cierto que el horizonte eleccionario está muy lejos y estos números tan solo pretenden ordenar un poco lo que dejó estos primeros meses hegemonizados por el conflicto agropecuario. De este modo la figura emergente del conflicto, Cobos, se sitúa como un referente a tener en cuenta por las estructuras opositoras al gobierno pensando en algún distrito para las elecciones legislativas del año próximo. Claro que la decisión de enfrentar al gobierno llevaría a pensar si continuaría siendo el vicepresidente del gobierno nacional
Días atrás se llevó a cabo la convención radical, identidad partidaria histórica que posee Cobos, donde el Senador Morales hizo hincapié en la falta de liderazgos fuertes que acompañen la estructura nacional del partido centenario. Estructura muy diezmada en los últimos años pero que no es despreciable en el contexto actual argentino. En esa búsqueda de representantes fuertes e identificados con el partido (en términos politológicos, un militante y no un arribista) la líder de la Coalición Cívica aseguró que estaría dispuesta a hacer un frente común con los radicales no alfonsinistas y algunos sectores del socialismo. Pero dejaría fuera de esa construcción a Cobos.
El macrismo parece juguetear con acercamientos a aquellos peronistas que no tienen lugar en el universo PJ kirchnerista. Claro que este sector paria del peronismo, liderado por Eduardo Duhalde, resulta de difícil definición hoy en cuanto a su penetración en la estructura que conduce Kirchner. Considero que aún resta bastante brega, al interior del movimiento, por espacios de control dentro de la estructura mayoritaria del país. Veremos que pasa acá. Ya Felipe Solá y Mario Das Neves arrancaron motores hacia el 2011. Hablando de motores, y bonaerenses más precisamente, el ex-motonauta Daniel Scioli mantiene una valoración de su persona y de su gestión con saldo positivo. Esto lo ubica como un referente de relevancia en el distrito, pero eso no se derrama hacia los posibles candidatos oficialistas, incluido Néstor Kirchner. Enmarañado se encuentra este distrito. Aquí el kirchnerismo deberá meditar bien la elección de su candidato. Sergio Massa aún posee espacio para crecer, mientras que Florencio Randazzo no logra índices relevantes. Cabe destacar el buen posicionamiento de Fernando “Pino” Solanas, quien ha tenido amplia cobertura mediática a partir de su documental sobre el estado de los ferrocarriles y la acusación con bajo sustento que hizo el ministro de justicia, Aníbal Fernández, sobre el cineasta y político, luego de los incidentes con los trenes del GBA.
Hasta acá llego hoy, mientras medito si continúo los análisis con este tono.

viernes, 10 de octubre de 2008

miércoles, 8 de octubre de 2008

7)

Tengo un amigo que nos pregunta si sabemos algo de la crisis. Nos pregunta si sabemos de alguien que diga algo sobre aquello que los medios del mundo titulan con letras de catástrofe en cuanto matutino se lea. Y ya empezaron a caer las primeras víctimas. Un ex-empleado de una financiera en Los Ángeles cazó el bufo y se llevó puestos a su mujer, sus 3 hijos y su suegra, para concluir con el tiro propio del final. ¿Cuánto esperaremos para ver a alguno tirándose del balcón?. Bueno no detengamos el ritmo, vamos para adelante. Crisis, de lo que se dice crisis es la que tengo en mi laburo. Estamos a día 8 y todavía no cobré. Entonces me acerco al área de administración y le pregunto al responsable si esto tiene que ver con la crisis global. Porque nunca pasó esto. Es la primera vez en casi 5 años. ¿Qué pasa?, ¿invirtieron mal la guita?. No me digas que la empresa se va a pique. No, quedate tranquilo, es por una cuestión interna, me dice. La AFIP nos embargó una cuenta y estamos medio inmovilizados. Ah bueno, le digo, pero no tiene nada que ver con la crisis entonces. ¿Pero vamos a cobrar en breve?, pregunto. Sabes lo que pasa, que hoy tengo terapia y después voy a yoga y tengo que garpar, viste. Ya la sesión anterior no le pagué y ahora voy de vuelta con lo mismo y justo estoy tratando el tema de la repetición, viste. Igual ahora que me acuerdo el tema del pago y la terapia en general fue medio embarullado para mí. Hay veces que atino a irme sin pagar. Otras que le pago de más. A veces ella no tiene cambio y lo dejamos para la próxima o le adelanto guita. Una vez que me iba sin pagar me dice: “parece que hoy decidís no pagar”. Al principio me ataje. Me preguntaba si la intención de pagar o no estaba relacionado a lo que habíamos tratado en la sesión. No hubo manera de operativizar eso. Bien por la terapia, ¿no?. Y mejor que vaya a terapia y a yoga, y que tenga guita para morfar y darme gustitos porque sino ¿para qué labura uno acá? Allá donde están ustedes, no sé. Pero acá se labura para eso. Y también tengo las cuentas que se acumulan. Mañana me vence el cable. Tengo un amigo que pregunta el sentido del cable si no televisan Barcelona-Atlético de Madrid. Que se yo, a mi no me parece tan importante ver ese partido. Quizá un poco por Messi. Pero mejor no verlo, porque después viene a jugar al sub-continente y da la impresión que Borges tenía razón (ESSE EST PERCIPI). El tipo parece un fantasma, cruza el atlántico y se trauma. Veremos. Igual es un crack, como Maradona. Si, como Maradona en otra época. Maradona es un clásico y Messi su versión nueva. Por eso es como Maradona, no mejor que él. Que quieren que les diga, para mí el fútbol de acá es más atractivo que el resto de las ligas. Bueno, en realidad no estoy siguiendo como antes la Premier, pero ponele que está por detrás de la Premier nada más. Acá se juega un partido y no sabes quién puede ganar. ¿O no?. ¿A ver?. Antes me acuerdo que venían los cuervos, los diablos y la academia al gallinero y era ver como ganábamos. Si con huevo, con toques o con las dos cosas. Pero el resultado estaba cantado. Ahora ni en pedo. Lo mismo sucede en la bombonera. Nadie tiene miedo. Es un campeonato de atrevidos. Y eso me gusta. Entonces cada seis meses tenes un campeón impensado. ¿Se acuerdan cuando en el pasado, la sección deportiva de cualquier diario ponía sus favoritos? Y siempre eran dos o tres. Bueno ahora si lo hicieran, porque ya dejaron de hacerlo porque no sirve para nada, tendrían que agregar a la mitad de los equipos. Yo no entro en la discusión de que si la cosa se igualó para abajo o para arriba. Tampoco lo haría en política si el día de mañana todos comemos 1 vez por día, pero comemos todos. Está bien, comemos menos, pero comemos todos. Y de acá no me muevo, podes venir con cualquier cosa, pero comemos todos. ¿Será que este es un tiempo impensado? Con presidentes impensados, con crisis impensadas y con campeones impensados. Los tiempos impensados. Si el día de mañana escriben un libro sobre este tiempo, métanle ese nombre. Qué cosa el marketing que pensas en pavadas y te sentís ingenioso. Como el otro día que escuché a un tipo genial decir una genialidad. Hacía tiempo que no escuchaba a alguien genial decir una genialidad: Facebook es como hacer branding con personas (Wilkipedia para branding, please). ¿Y la liga española que tiene que ver con el branding?. Mucho, porque sino no estarías demandando por Barcelona-Atlético de Madrid y si por Boca-Tigre o San Lorenzo-Velez. Yo vi un resumen del partido y me pareció que el Atlético quiso fanfarronear, cancherear pero para afuera, para la prensa. Dijo, me chupa un huevo el campo nou, yo te salgo a atacar desde el minuto 1. Te juego de igual a igual. Error. 5 pepas en media hora. Qué no se tire nadie del balcón colchonero. Porque acá gana cualquiera pero nadie pretende empezar ganando en el minuto 1 ni 5 ni 10. El fútbol argentino, sus equipos, son precisamente atrevidos y honestos. Si veo que a Boca no le puedo entrar por ningún lado, bueno, estimo que un empate está bien. Pero luego de evaluar que no te puedo entrar por ningún lado. Es un esquema de juego donde el arco contrario es el objetivo (gracias Marcelo Bielsa). Todo lo que sucede tiene que ver con el arco contrario. Allá no, todo lo que le sucedía al Atlético de Madrid tenía que ver con su propio arco. 5 pepas en 30 minutos. Que subidón. En definitiva el Atlético madrileño no es el culpable. Sino el esquema dominante que impera. Fijate que solo el Villareal (equipo sudamericano durante 1 década) es el único que se anima en cualquier cancha. Que se anima a plantarse en campo rival. Quizá también el Valencia en su momento hizo algo parecido. Igual estamos hablando de fútbol amateur, frente al poderío británico. SI VOLVIERA A NACER ME GUSTARÍA HACERLO EN LAS ISLAS. Londres, Manchester o Liverpool me da igual. Y si no hubiera un Pub lo inventaría y si no hubiera fútbol lo crearía. Entonces vemos que los sudamericanos aprueban el plan de rescate del fútbol español. Quizá en 10 años y con esta tendencia de extranjerización de su liga logren que uno diga: SI VOLVIERA A NACER ME GUSTARÍA SENTARME EN EL BERNABEU LUEGO DE COMERME UNOS MONTADITOS. Mientras tanto nada. Que se metan sus derechos de TV por culo. La Televisión Pública me pasa Gimnasia y Esgrima de Jujuy-Huracán y ves los goles ir de un arco a otro. Pagué 0. Hay que atreverse, claro. Y digo que hay que atreverse porque uno está temeroso y con razón. Hay que atreverse a escribir todas estas líneas. Yo por ejemplo estoy escribiendo más, y casi que lo hago en una isla desierta. Es decir, meto mensajes en una botella y lo arrojo al mar. Quizá alguien lo reciba, quizá no. Quizá alguien lo lea, quizá no. Quizá alguien responda, seguro que no. Pero no me pongo a llorar (perdón Páez) porque nadie me lea o nadie me escriba. Yo igual los leo y a veces les escribo. Pero decía que hay que animarse, como Bernanke, un groso, el tipo mandó en el New York Times una frase estupenda, era algo así como: un ateo cree en Dios en momentos de estrés o miedo. Ningún ideólogo aparece cuando el sistema financiero está en crisis. Bernanke… si pusiera toda esa astucia para que comamos todos, todos los días, aunque sea 1 vez por día… Y pienso en Bernanke porque la duda era sobre la crisis económica global. Bah, yo digo económica, porque financiera es como muy lejana, pero quizá lo que es financiero allá sea económico acá. ¿Qué estoy diciendo?, vamos a darle un cierre a esto. Pero, pará. Otra vez lo hizo. Hablo de Cristina. Ya armó el “comité de crisis”. Ya está, el oficialismo decretó desde el relato (como lo viene haciendo desde hace mucho tiempo) que el país ha entrado en la crisis. Pero si la semana pasada dijo que no pasaba naranja. Pícara Cristina. Si baja la inflación ahora tendremos a “los de siempre” diciendo que en realidad fue el contexto internacional y no el gobierno quien lo hizo posible. Leélo a Abraham si todavía tenés dudas (http://www.perfil.com/contenidos/2008/10/04/noticia_0008.html). Acabo de comprarme una tarta de acelga que estaba en los 8.6 pesos y me lo cobraron 8.5 pesos. Entonces el debate tuvo dos posturas: los que consideraban que esa variación se originaba en el proceso de desflación que vivirá el país mientras que otros consideraban que la falta de monedas hacía que los precios se redondeen en 0 o 50 centavos. Igual el redondeo fue para bajo. Y sabemos que hace rato que nada es gratis en nuestra vida. En fin, a veces si llueve el fango no es tan despreciable. En fin.
Así que, así estamos, con la crisis “Fight Club” en ciernes y que viene del centro a la periferia. Como una ola de norte a sur, de lo financiero a lo económico: lo que en el norte se forma como cesación de pagos de créditos de alto riesgo acá puede romper como desempleo. Entonces miramos a Brasil, pero ni en pedo un Flamengo-Fluminense que es un bodrio. Miramos la cotización del Real, si los productos de “línea blanca” invadirán el país. Si la soja se va a pique, si el gobierno podrá seguir financiando aquellos precios que no suben del todo, que nos permiten a duras penas llegar a fin de mes. Pero ahora me acuerdo que yo no cobré, y acá viene Claudio, que labura en administración y nos comunica que cobraremos mañana, entonces todo vuelve a ser de colores. Tengo 12 clases más de yoga pagas, me compraré un vinito para la cena, seré un ciudadano responsable y pagaré mis cuentas. Incluso el cable que no pasa Barcelona-Atlético de Madrid, ni a alguien más o menos lúcido que nos diga algo que se entienda de la crisis. Y seguiré tranquilo porque hay laburo y ya entendí eso de que la libertad tiene que ver con la responsabilidad. Ergo, laburo porque soy libre. Y no es irónico y si no lo entienden se los explico en otro momento. Laburamos porque somos libres. Pero también laburamos porque no somos iguales (listo, cerré las 2 categorías más importantes de la política de los últimos 200 años en una frase relacionada a mi cotidianeidad). Igual eso de laburar ya no tiene nada épico. Hoy laburar es un decir porque si esto sigue así, con los precios en baja de los commodities, ergo ingresa menos dinero, ergo hay menos guita, ergo baja el gasto, ergo baja el consumo, ergo baja el laburo, ergo sobra gente, ergo desocupación, ergo pobreza. Y ya sabemos que la pobreza no genera revolución, ergo no queremos ser pobres. Pero también lo de laburar es un decir porque hace rato que laburamos más bien poco. Hay mucha gente al pedo en el laburo. En mi laburo, por ejemplo, formamos una agrupación (Not Worker World) que pretende recibir un salario a cambio de trabajar poco y lento. Las reuniones discurren por temas vinculados a las excusas más eficientes para faltar, etc. Es fácil detectar cuanta gente está al pedo en sus laburos. Y sentir que casi pertenecemos a una institución por caridad. La caridad del sistema. Lo que me lleva a pensar lo fácil que sería que dejaran a varios tipos y tipas sin laburo, sin caridad. Entonces volvemos para atrás y decimos: laburamos o no laburamos porque somos libres pero no iguales. Pero nadie nos prometió un jardín de rosas (gracias Páez again), y si alguien nos prometió las rosas ya aprendimos que no podemos confiar en cualquiera. Y si de desconfiar se trata, qué mejor que reproducir, acerca de todo esto, lo que dijo alguien hace unos días: empezó la semana antes del fin del mundo. Así, tranquila, con buen clima, algo sobresaltado por no cobrar a tiempo, pero tranquilo, esperando hacerle unos cuantos goles a Uruguay en el gallinero y con Messi. Pero también sin esperar nada. Diciéndoles que los quiero mucho, poco o nada pero que la cosa no se ponga negra, negra. Porque viene Manuelito, y si los padres no lo trauman mucho quizá el día de mañana, después de que pase la semana posterior al fin del mundo, el tipo se pueda reír sin desparpajos, y nosotros también, mientras le contamos las inclemencias y las glorias. Una narración fantástica del 2001, de Los Redondos, de los 90, de Salsipuedes, de la Crisis Global, de la tele de 5 canales, de Álvarez Thomas, del bar de la facu, de las tertulias en la cocina, de las caídas y las levantadas, de los pánicos y los llantos, de la obsesión por una mina y de los cordones umbilicales que costaron cortar. De la primavera templada y los otoños agradables, De las barbas y las imitaciones, de los colegios militares y/o religiosos y del ghetto en el que nos conocimos: la facultad de sociales. Y de lo que está por venir. Y de saber preguntarse bien: ¿y ahora como sigue esto? Porque si de esperar se trata, aparece satán.
PD: esto leí sobre la crisis y el impacto acá: http://www.econometrica.com.ar/productosservicios/archivos/mensual/2008_09.pdf

viernes, 3 de octubre de 2008

6)

Me voy a caminar. Chau.
Inmediatamente después de abrír la puerta ya transitaba por el bosque. Qué raro, pensaba. No reconozco lo que veo. A pesar de saber lo que es un árbol, una planta, un sendero o un cielo, los que se me presentaban no eran mis árboles, mis plantas, mis senderos o mis cielos. Como si estuviera en un espacio prestado, depositado por designios ajenos. En definitiva no era otra cosa que aquello que entendemos por nuevo, por novedoso. Como tomarme el 17 a la madrugada y, como pocas veces, sentir una empatía compartida con quienes nos trasladamos a esa hora, en ese lugar, y con diferentes destinos. La vida colectiva. Pero estaba en lo del bosque, mejor toco timbre y me bajo del bondi. La sensación era agradable y extraña. Mientras recorría sus pasillos con paredes de vegetación de difícil penetración que me impedían una visión lateral del camino, escuchaba música de guitarra. Me daba la sensación de estar próximo a un fogón con personas que aplaudían, cantaban y reían. Había una promesa de cierta felicidad al final del camino. Una vida posible, repetía mi cabeza. Pero no sentía ni la necesidad ni la obligación de encontrarlos. De verles las caras. Ya aparecerían. Ya chocaría con ellos. Esa era la impresión dominante. Me conformaba con su idea de existencia, con la idea de que algunos en esas circunstancias estuvieran allí. Casi sin constatar su real existencia. Su presencia por fuera de mi cabeza. El hecho de que formen parte del lugar me vastaba (si, con v). Vivía un estado alegórico. Y no parecía estar mal. Durante un tiempo.
Era de noche, pero el bosque lucía un esplendor lumínico artificial que generaba una mirada fantástica del lugar. Los reflectores acompañaban mi andar de aquí para allá. El resto eran voces. Ruidos humanos.
No sé cuanto caminé. El sentido del tiempo se desvanecía, convirtiéndose en islotes momentáneos. La realidad como instantes. Ya era de día. Seguía en el bosque. Pero ese bosque comenzó a poblarse de hombres. Más precisamente era un conjunto de hombres que corrían en una misma dirección. Una dirección contraria de la cuál provenía una fuerza potente. Una fuerza perseguidora. Lo extraño es que sentí el impulso de correr. Como si yo también fuese perseguido. Sin saber los motivos, correr se convertía en un imperativo. Algo me enlazaba a esos hombres que escapaban para salvar su pellejo. Era una situación de bandos. Estaban los que corrían, que los veía, y estaban los que perseguían, que sin verlos se manifestaban como fuerza perseguidora. Corría, sin hablar con nadie. Sin hacerme señas con los otros que corrían a mi lado. Corría para salvarme de esa fuerza. Mientras pensaba que ya era tarde para detenerme, la fuerza perseguidora delineó una silueta: indios sobre caballos. Estaban por todas partes, con sus flechas y sus arcos. Las opciones evaluadas eran o bien separarme del grupo y correr solo por el bosque y que con suerte me les pierda a los perseguidores o bien seguir con el conjunto y adentrarme en una zona urbana emplazada en medio del bosque. Decidí seguir hacia el concreto de la construcción. La casa se me presentaba como refugio. Al subir las escaleras encontré el resultado de una lucha de bandos: unos tirados en el piso y atados con sus camisas y sus jeans, los que por algún motivo reconocía como compañeros. Los otros, los indios, parados, victoriosos, con sus pieles relucientes. Uno de ellos se acercó a mí y sin entender ninguna palabra comprendí que había decidido mi muerte. Y sin mucho más me clavó el hacha en el medio de la cabeza. Fue un instante. Desde que comenzó a levantar el brazo hasta impactar el filo en mi cabeza, sentí mi entrega. Nada podía hacer. Nada atiné a hacer. Solo a pensar como era esto de morir, en presente. La herramienta perforó mi cabeza y quedó incrustada en ella. Luego, el indio me miró, yo seguí de pie y me indicó el camino a desandar. Bajé las escaleras. Con el hacha en la cabeza seguí caminando por el bosque. Volviendo por donde había venido. A pesar de la cresta de piedra filosa que cargaba, mi lucidez estaba intacta. Los otros edificios se presentaban como opciones alternativas que me hubiesen evitado el dolor de cabeza. Me hubiesen posibilitado otro destino. Mi cabeza seguía en un plano de persecución.
Seguí caminando, y al instante siguiente se hizo de noche, como al principio, llena de faroles lumínicos que no alcanzaba a detectar su ubicación. Volvieron a escucharse las guitarras, los cantos, las palmas, la idea de fuego, de humo, de ronda. Ya no tenía el hacha en mi cabeza. Había sobrevivido a mi pena.
Cuando abrí los ojos, recordé un deseo que tuve cuando cierta vez el cuerpo no se detenía en su temblor. Deseo que en algún momento fue un pedido: no quiero tener miedo.

jueves, 2 de octubre de 2008

Premura de la provincia (Septiembre 08)

Estudio de imagen y escenarios electorales. Unidad de análisis: los habitantes de la provincia de Buenos Aires. 1000 casos. Ponderado por género, edad, NSE y circunscripción electoral. Última semana de Septiembre 08.
En las preguntas de imagen y gestión se agrupan las categorías Muy positiva y algo positiva en POSITIVA; y las categorías muy negativa y algo negativa en NEGATIVA.

Imagen Cristina Kirchner:
Positiva: 40.0%
Negativa: 56.0%
Ns/Nc: 4.0%

Evaluación de la gestión del gobierno nacional:
Positiva: 44.9%
Negativa: 52.9%
Ns/Nc: 2.6%

Imagen de Daniel Scioli:
Positiva: 51.7%
Negativa: 39.0%
Ns/Nc: 9.3%

Evaluación de la gestión de la gobernación de la provincia de buenos aires:
Positiva: 52.5%
Negativa: 43.3%
Ns/Nc: 4.2%

Imagen de dirigentes:
Néstor Kirchner: Positiva 50.5% / Negativa 48.3% / Ns-Nc 1.3%
Mauricio Macri: Positiva 62.7% / Negativa 32.9% / Ns-Nc 4.4%
Aníbal Fernández: Positiva 32.3% / Negativa 57.8% / Ns-Nc 10.0%
Florencio Randazzo: Positiva 17.8% / Negativa 30.5% / Ns-Nc 51.7%
Eduardo Duhalde: Positiva 31.4% / Negativa 63.9% / Ns-Nc 4.7%
Felipe Solá: Positiva 52.2% / Negativa 38.7% / Ns-Nc 9.2%
Sergio Massa: Positiva 46.6% / Negativa 20.1% / Ns-Nc 33.3%


Escenarios electorales:
A gobernador (2011):
Daniel Scioli: 37.5%
Francisco de Narváez: 16.9%
Margarita Stolbizer: 9.3%
Luis Patti: 5.7%
Juan Carlos Blumberg: 3.1%
Ricardo Alfonsín: 1.8%
Luis Sarghini: 1.4%
Negativo: 11.5%
Ns/Nc: 14.1%

A diputado nacional (2009).
Escenario I:
Néstor Kirchner: 26.0%
Fernando “Pino” Solanas: 14.6%
Eduardo Buzzi: 12.2%
Felipe Solá: 12.0%
Margarita Stolbizer: 10.7%
Negativo: 7.7%
Ns/Nc: 16.8%

Escenario II:
Sergio Massa: 23.8%
Francisco de Narváez: 18.6%
Fernando “Pino” Solanas: 15.0%
Margarita Stolbizer: 8.8%
Eduardo Buzzi: 7.8%
Negativo: 5.6%
Ns/Nc: 20.4%

Escenario III:
Sergio Massa: 28.3%
Fernando “Pino” Solanas: 13.9%
Jorge Macri: 13.8%
Eduardo Buzzi: 11.0%
Margarita Stolbizer: 10.1%
Negativo: 7.4%
Ns/Nc: 18.5%

Escenario IV:
Francisco de Narváez: 18.7%
Fernando “Pino” Solanas: 15.8%
José Scioli: 14.6%
Margarita Stolbizer: 11.7%
Eduardo Buzzi: 10.3%
Negativo: 8.1%
Ns/Nc: 20.9%

Escenario V:
Fernando “Pino” Solanas: 17.7%
Margarita Stolbizer: 14.3%
Eduardo Buzzi: 14.2%
Jorge Macri: 14.1%
Florencio Randazzo: 8.4%
Negativo: 9.4%
Ns/Nc: 24.8%